En un contexto nacional donde persisten prácticas discriminatorias que violentan los derechos reproductivos de las mujeres, la iniciativa presentada en el Congreso de Guerrero para proteger la lactancia materna en espacios públicos representa un paso importante hacia la garantía del derecho a una maternidad libre de violencias.
A pesar de los avances legislativos, en México sigue siendo frecuente que mujeres sean señaladas, expulsadas o avergonzadas por alimentar a sus hijos en la vía pública, lo que configura un acto de violencia simbólica y estructural. La lactancia no sólo es un acto de nutrición, sino también un derecho humano, tanto para la madre como para el bebé, y su protección en el ámbito legislativo es clave para construir una sociedad más equitativa, libre de estigmas y respetuosa de los derechos de las mujeres.
La Comisión de Justicia del Congreso del Estado de Guerrero analiza una iniciativa de reformas y adiciones a la Ley para Prevenir, Combatir y Eliminar la Discriminación en el Estado, con el objetivo de considerar como acto de discriminación el prohibir, limitar o restringir el derecho de las mujeres a amamantar en espacios públicos.
La propuesta fue presentada por la diputada Hilda Jennifer Ponce Mendoza, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), y tiene como propósito armonizar la legislación estatal con la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, reformada en 2021, que reconoce explícitamente este derecho.
“Para poder tener mejores resultados en el fomento a la lactancia materna, es necesario poner en marcha acciones que ayuden a eliminar las barreras de tipo social aún presentes, que discriminan a las mujeres que amamantan a sus bebés tanto en los centros de trabajo como en los espacios públicos”, indicó la legisladora.
En México, datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT 2022) revelan que sólo el 28% de las madres amamantan exclusivamente durante los primeros seis meses, a pesar de las recomendaciones internacionales de la OMS y UNICEF. Entre las principales razones para el abandono precoz de la lactancia se encuentran la falta de apoyo institucional, los estigmas sociales y la ausencia de condiciones dignas para ejercerla, especialmente en espacios públicos y laborales.
Por ello, la diputada Ponce Mendoza subrayó que las madres guerrerenses merecen protección y facilidades que garanticen el ejercicio pleno de la lactancia, mediante acciones que sensibilicen a todos los actores —tanto sociales como institucionales— sobre su importancia y sobre la necesidad de implementar medidas que la protejan en todos los ámbitos.
La reforma propuesta establece que cualquier acto que tenga como fin prohibir, limitar o restringir a las mujeres amamantar en público deberá considerarse un acto de discriminación, sujeto a sanciones conforme a las disposiciones vigentes en la ley estatal. Asimismo, al armonizarse con la norma federal, se generan condiciones más favorables para que cada vez más mujeres ejerzan su derecho a la lactancia sin miedo, sin estigmas y en espacios seguros, garantizando así el bienestar integral de la primera infancia.