El feminicidio no solo arrebata vidas de mujeres, sino que deja una estela de dolor y desproteccion en sus hijas e hijos. En México, el 75% de los feminicidios deja al menos a una niña o niño en situación de orfandad, según el Observatorio Ciudadano Nacional contra el Feminicidio.
En Guerrero, la violencia feminicida coloca a la entidad en el lugar número 15 del ranking nacional con 22 feminicidios acreditados judicialmente durante 2024, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
A pesar de la magnitud del problema, el Estado mexicano carece de políticas públicas efectivas para atender a las niñas y niños que quedan en orfandad. Aunque existen protocolos y reformas legales, su implementación es limitada. Por ejemplo, el Protocolo Nacional de Atención Integral a Niñas, Niños y Adolescentes en Condición de Orfandad por Feminicidio, publicado en 2021, aún no se ha elevado a rango de ley, lo que dificulta su aplicación efectiva.
Frente a esta realidad, la diputada local de Guerrero, Leticia Mosso, ha propuesto una iniciativa para proteger a los menores huérfanos por feminicidio. El planteamiento incluye reformar la Ley 812 para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Guerrero.
La enmienda establece la creación de un fondo especial que garantice apoyo psicológico, cobertura de salud y becas educativas para las y los menores afectados. Además, busca establecer un registro estatal de niñas, niños y adolescentes en situación de orfandad por feminicidio, con el fin de diseñar políticas públicas adecuadas para su atención y protección.
“Debemos elaborar legislaciones más robustas que no solo encarcelen a los perpetradores, sino que también protejan a las familias de las víctimas. Esto incluye la creación de programas de apoyo psicológico y jurídico para las y los hijos de las víctimas, asegurando que no queden desprovistos”, apuntó Mosso Hernández al presentar ante el pleno la propuesta de ley.